¡Cómo pasan los días! hace ya más de un mes que os escribíamos nuestro primer comunicado contándoos cuanto acontecía por la Sierra del Rincón durante el primer mes del año y hoy, sin querer faltar a nuestra cita, volvemos a daros noticias.
Febrero ¡qué mes tan esperado! por eso de que el invierno se nos va haciendo largo y es cuando los días van alargando poco a poco, estamos deseando aprovechar los minutos de luz que nos regalan sus mañanas y sus tardes.
Dicen “Febrero el corto, en el que ningún día se parece al otro” y se ha cumplido este refrán que le tacha de oscilante, se han alternado días de borrasca y nieve, aliada incondicional de este año, con increíbles días despejados de anticiclón, aire limpio, transparente y un ambiente muy soleado.
Hemos sido testigo de cómo los ánsares han realizado su viaje anual de África a Europa atravesando los cielos de la Sierra del Rincón. Estos gansos han sido divisados y escuchados por muchos vecinos, todo un espectáculo hacerlo desde la Laguna de El Salmoral de Prádena del Rincón.
También es el mes en el que algunos mamíferos entran en celo y las rapaces realizan la puesta de huevos sirviéndose de la mayor claridad de los días de la que hablábamos unas líneas más arriba “hacía San Matías se igualan las noches con los días y empieza a dar el sol en las umbrías” (24 de febrero).
El Hayedo sigue su ciclo, la nieve y el hielo se hacen protagonistas de él durante numerosos días en los que prácticamente se presenta impracticable. La umbría y las heladas de -9,8 ºC en las madrugadas ocasionan peligrosas placas de hielo en la que tan solo los habitantes del bosque: corzos, jabalís, gatos monteses, zorros… se atreven a pisar.
Los 6 días de sol radiante con temperaturas máximas de 15º C registrados en las horas centrales de día hacen aparecer las primeras flores, los Croqus carpetanus o el comúnmente llamado azafrán serrano, fieles indicadores de que el invierno está próximo a acabar.
Los vecinos de La Hiruela, Horcajuelo, Montejo, Prádena y La Puebla continúan su duro invierno en la Reserva de la Biosfera. Cada día tienen su mirada más puesta en los huertos, no en vano han comenzado los trabajos previos a la preparación del terreno: las podas e injertos de los árboles frutales y limpia o “roza” de las callejas que les conducen hasta ellos.
Nuestro Equipo ha trabajado también en La Huerta Catalina de La Hiruela, entre las tareas de conservación de las variedades tradicionales de frutales se ha sustituido un Manzano de Pepita, que fue roído por los topillos el pasado año, gracias a la donación de la Asociación La Troje.
Otra ocupación principal de los vecinos estos días es la leña, los días pasan muy rápido y saben que tienen que terminar sus “suertes” concedidas antes del mes de abril. Es una actividad muy valorada porque les da combustible para el fuego de sus chimeneas.
Muchas gracias por leernos, nos despedimos hasta el mes que viene, en el que seguir trasladándoos más “vida”.
Un abrazo de todo el Equipo.
